/Sixto González «El Carucha».

Sixto González «El Carucha».

La discusión sobre quién fue el mejor de la historia es injusta. No se puede ni se debe, en mi opinión, hablar del mejor de la historia, sin ser injusto. ¿Pelé o Maradona? ¿se mete en la discusión Di Stefano? ¿hay lugar para Messi? ¿no entra Cruyff?. Y acá en Uruguay…¿Scarone era mejor que el Pepe Schiaffino?, ¿Rocha, Francescoli, Luis Suárez están en carrera?….¿y Ciocca, Walter Gómez o Piendibene? Creo que quizá la discusión debería ser cual fue el mejor en una época determinada, o en un puesto determinado dentro de una generación. Y más cuando hablamos de jugadores que la mayoría de nosotros no vimos jugar. ¿Quién fue el mejor en la historia de Liverpool? Mi padre dice que el mejor que él vio fue el “Tano” Bertochi. Pero otros pueden pensar en Saúl Rivero, o en  Denis Milar, ¿Pero y de los que no vimos? ¿No puede ser Domingo Etchegoyen, Olímpico que dicen era mejor que Petrone? ¿o el “Tano” Sena, el jugador uruguayo con más goles en el Calcio italiano?  ¿y el “Ruso” Michín?…Eso jugadores de leyenda que ninguno de nosotros vio, esos de color sepia, o blanco y negro, ¿habrán sido los mejores? ¿Cómo saberlo si no los vimos? Sobre ellos hay que escuchar a los veteranos. Y los veteranos mas veteranos decían que el mejor que se vio jugar en Liverpool fue Sixto González… “Carucha”.

Hace muchos años, caminando por Tristán Narvaja, encontré un libro llamado “Reyes, Príncipes y Escuderos”. La tapa con unas pelotas de fútbol, y la autoría del gran Franklin Morales, me hicieron parar enseguida e interesarme por ese libro. Entré a leer la contratapa, y vi que estaba dedicado a las figuras de nuestro fútbol, de los años 40 en adelante. Julio César Benítez, Antonio Alzamendi, Alberto Spencer, Atilio García, el “Pepe” Schiaffino, Elbio Pavoni, Walter Gómez…..Sixto González..!!!

Y listo, lo compré sin mirarlo. Tenía a Sixto González, a ese que los veteranos más veteranos dicen que fue el mejor. Y del que hay tan poca cosa escrita. Lo compré sin dudarlo. Y cuando en casa comienzo a hojearlo veo muchas fotos y 7 hojas sobre la carrera de Benítez, 10 hojas y fotos sobre el “Pepe” Schiaffino, 6 hojas sobre el “Mono” Gambetta, 5 hojas sobre el “Hormiga” Alzamendi, y así con todos….2 o 3 fotos….7 u 8 hojas. Hasta que llego a Sixto. El gran “centrojás” de Liverpool, el que defendió a la Celeste, el campeón de América, el que decían jugaba mejor que Obdulio….La decepción fue grande cuando vi que nuestro mejor jugador tenía solamente dedicada 1 hoja. Nada más que 2 páginas, y ninguna foto para el jugador más grande que se calzó la camiseta de Liverpool. Me sorprendió y seguí mirando el resto de jugadores, y todos tenía fotos, y 6 o 7 hojas. El nuestro solamente una. Sin embargo, por respeto al gran Franklin Morales,  decidí enseguida leer lo que decía de Sixto para entender que había pasado.

En la semblanza sobre nuestro capitán, Franklin pone de título: “El fastidio de la indiscreción”. Dice en una parte…. “Allá por los años 60,70, Sixto González era aún invocado por referentes como Roque Máspoli, con quién actuara en Nacional y Liverpool “como el mejor centrojás que vi jugar”. Negro, de gran físico y lentos desplazamientos, jugaba al tranco mandando por imperio de su parsimonioso dominio de la pelota e inteligente sentido de la ubicación y el pase”. Luego de una mínima semblanza, el autor explica: “…durante semanas procuré ubicarle sin que nadie supiese de sus días. Terminé enterándome trabajaba como sereno municipal nocturno en el “Parque Batlle”, en Avenida Italia y Ricaldoni…..Una noche fui hasta la casilla que estaba frente al monumento a la carreta de don José Belloni….Cortés aunque distante le dije del interés de mi visita….- ¿Va al fútbol?…..- No….¿a que? Al fútbol lo dejé donde quedó, quieto, olvidado, como todo lo pasado….Usted perdone ¿no?….”

Según lo que cuenta Morales, nuestro gran crack vivía olvidando destrezas que ya no le importaban. Las dejaba en el pasado…quizá por eso su semblanza ameritó simplemente una hoja. Sixto no habló más. Y tampoco aparece de él ninguna foto en ese libro, una nota al pie aclara que no fue posible ubicar una sola fotografía reproducible suya. Cosa que llama la atención dado que muchos años atrás, en algunas publicaciones, aparecían varias fotos suyas.

La decepción por lo poco que se rescata de nuestro crack también me vino con las recordadas revistas “Estrellas Deportivas”. En una colección de más de 160 números, de los cuales la inmensa mayoría era sobre futbolistas, y de entre ellos la mayoría era de los años 30, 40, y 50, no había un número dedicado a Sixto. Apenas alguna referencia de otros jugadores que lo enfrentaron y alguna foto en la que aparece jugando en la selección. En otra recordada Colección llamada 100 años de Fútbol, el capítulo 10 fue escrito por Eduardo Gutierrez Cortinas y tiene un nombre que hoy seguramente estaría prohibido: “Los negros en el fútbol uruguayo”. Reseñaba a los grandes jugadores de color que llenaron de fútbol las canchas de nuestro país. En una parte se hace una reseña de “33 Orientales Oscuros de un fútbol glorioso”, otro título bravo para esta época, en la que aparece una mínima semblanza de nuestro crack: “ Nació en Lezica, en diciembre del año 15. De las inferiores de Nacional (1933) a Deportivo Juventud (1938), y a Liverpool (1939). Tuvo buena actuación celeste, pese a haber disputado sólo 9 partidos: ganó la Copa Río Branco (1940), fue Campeón Sudamericano (1942), y sólo perdió una vez (1 a 0) con Argentina, en Chile, resultando lesionado”.

Siento que se ha sido injusto por parte del periodismo con la figura y carrera de Sixto González. Por esto he decidido meterme lo más posible en su campaña para que no sea olvidado en la historia de Liverpool.

Hay una casualidad linda con respecto a Sixto. El que está considerado el mejor jugador del club, nace a la vida el mismo año que su club. Liverpool nace oficialmente el 15 de febrero de 1915, Sixto el 30 de diciembre del mismo año. Dicen que era el típico “Centrojás” de una época inolvidable de nuestro fútbol y donde había cracks de verdad por todos lados. Sixto era el auténtico caudillo en la mitad de la cancha del equipo, con un gran panorama de campo. Jugador fuerte si era necesario, trancador, excelente en el manejo de pelota, se impulsaba muy bien al ataque, siendo además muy buen cabeceador…siempre dicho esto por los que lo vieron jugar.  

La opinión de Roque es una de las más confiables. Dijo en una entrevista: “Posteriormente pasé a Liverpool, cuando ya tenía 21 años. Jugué en ese club las temporadas del 39 y del 40, a raíz de que Nacional compró a un jugador e hizo un cambio con Liverpool en el que entré yo. Adquirió de Nacional a quien ha sido, a mi entender, el mejor centro half que he visto, Sixto González, quien después se fracturó la rodilla. ….Sixto fue el mejor. Un morochón alto, de estampa similar a la de Obdulio Varela. En realidad, en la selección Sixto era el titular y Obdulio el suplente en aquel sudamericano en que se lesionó. Repito, era un jugador de una enorme elegancia para jugar, imponente realmente». En otra entrevista, esta vez a Atilio Garrido, Roque le confiesa: “Sixto era mucho mejor jugador que Obdulio”. Vale también como ejemplo lo que decía el contador Fidel Russo el 23 de junio de 2005 en la Sesión Extraordinaria de la Junta Departamental en homenaje al “Profe” José Ricardo De León: “….La Edila Cristina Ferro se olvidó de mencionar que de Nacional pasó a Liverpool, en un recordado pase, porque a Liverpool le llegaron como 14 ó 15 jugadores, entre ellos, Máspoli ‑después campeón del mundo‑ y Sixto González, el mejor jugador de fútbol que yo conocí, aunque no pude ver a los anteriores. Era una de las aclaraciones que siempre me hacía Obdulio Varela. Cuando me veía, me abrazaba y me decía: “Sixto fue mejor que yo”. Obdulio vendía diarios en Paso Molino y jugó en Deportivo Juventud, al igual que Sixto….”.

Otro testimonio que va en ese camino lo recoge Héctor Lescano en su libro “Los Negros de la Cuchilla”, cuando recuerda que en la revista “100% Liverpool” en un reportaje a Santana Romero, éste hace referencia a que una vez Obdulio le confesó que sentía que Sixto era mejor que él. La confirmación la encuentro de mano del propio Obdulio, que esto decía en una serie de notas de la revista Deportes: “Sí, estaba en el seleccionado, pero de suplente. El titular era un fenómeno: Sixto González. Si él no se hubiera quebrado, nunca yo podría haber agarrado la titularidad en el combinado. Fue un jugador maravilloso en todo el concepto de la palabra, de una personalidad tremenda, de un fútbol hermosísimo. No, no es falsa modestia, o de hacerme el pequeño para aparecer bien. Yo se que en las ruedas de café, cuando los viejos aficionados hablan de quien fue el mejor, si Sixto o yo, siempre hay discusiones. Considero que él, fue mejor que yo. Era un caballero. Me gustaría verlo, para recordar tiempos pasados. Otro gran tipo. De esos que ya no vuelven, porque el molde se rompió”.

Jacinto y Sixto eran distintos. El negriazul tenía mejor técnica y una gran capacidad para robar la pelota y armar juego enseguida, mientras que Obdulio pesaba más por su presencia, y su remate desde fuera del área. En la única entrevista que encontré a Sixto, en la revista Deportes número 30 de febrero de 1969, Sixto decía: “Jacinto mandaba, ordenaba, buscaba todos los recursos dentro y fuera del fútbol. Yo siempre hablé poco, o nada…Creo que lo de Jacinto valía muchísimo, como lo dice la historia, sobre todo eso de Maracaná”.

En aquella época gloriosa de nuestro fútbol Adolfo Oldoine (Old), Jefe de la página deportiva de El Plata pero también humorista y libretista, sacaba rimas de su pluma, casi siempre sobre jugadores de los grandes. Pero en una ocasión la rima la tituló «¡ Sixto !»

Al tranquito, despacito,
como juegan los campeones,

¡ que corran los chambones !

Nacido en Montevideo, en la zona de Lezica, el 30 de diciembre de 1915, su familia era futbolera. Sixto era el hermano mayor de Santos González, un delantero que defendió muchos año a Central, y con el que Sixto se enfrentó en varios partidos. Nuestro crack comenzó la práctica del fútbol en 1933, en las inferiores de Nacional, pasando después en préstamo a Deportivo Juventud en 1938 de la divisional de ascenso, equipo que tenía su cancha detrás del Parque Central, y en el que jugó también Obdulio Varela. Sin embargo, su momento de más brillo lo tendría en Liverpool desde 1939, cuando ya el club de la Cuchilla se afianza en Primera. Con la casaca negriazul quedaría de allí en más y por siempre identificada la figura de Sixto. A mediados de 1945 sufrió una terrible fractura y tuvo que extirpársele parte de su rótula. Continuó jugando al fútbol en Liverpool hasta mediados de 1947 cuando se retiró.

En materia de la Selección, ganó la Copa Barón de Río Branco en 1940 a Brasil en su estadio, y haciendo uno de los goles del primer partido, del que fue figura. Integró el plantel del sudamericano del 41, alternando la titularidad con Obdulio Varela y fue campeón de América en 1942, ya como suplente de Obdulio, jugando pocos minutos. No pudo ir al sudamericano de 1945 por problemas en su trabajo y se retiró de la selección.

La llegada de Sixto a Liverpool

A comienzos del año 1939 el Club Nacional de Fútbol pretendía un golero y fue en busca del negriazul Nicolás Barbotto, campeón de Intermedia en 1936 y 1937, protagonista del ascenso ante Racing y de destacada actuación en 1938 ya en Primera División. Tan titular era Barbotto esos años en Liverpool, que un joven Aníbal Paz no tenía muchas chances en el arco negriazul, por lo que se fue a Bella Vista y luego a Nacional. Lo que son las vueltas de la vida futbolera, Nacional buscaba un golero para unirse a Aníbal Paz y elige a Barbotto.  El 18 de Marzo de 1939 en conversaciones entre Nacional y Liverpool, se le ofrecieron a nuestro equipo una serie de jugadores a cambio de la transferencia del gran arquero. El presidente de Liverpool Sr. Fernández Crespo informa a la Comisión Directiva acerca de sus conversaciones con el Dr. Narancio de Nacional, que le ofrece a Liverpool los siguientes jugadores: Roque Máspoli, Grosso, Ferro, Sixto González, Chiflet, Arbelbide y Artigas Rodríguez. La comisión aprueba por unanimidad. Todos llegan a Liverpool. 

Se juega un amistoso en febrero en el que Nacional, con Aníbal Paz en el arco, golea 11 a 1 a Liverpool. En el arco negriazul aún aparece Barbotto, pero ya debutan los jugadores llegados de Nacional. Sixto ve como caen los 4 goles de Atilio y los 7 restantes. Se mejora ganando un amistoso a Rampla 3 a 2, con Sixto en cancha y ya con Roque Máspoli en el arco. En 1939 el primer torneo es el Torneo de Honor. En la primera fecha, el 16 de abril, se da el debut oficial de Sixto González en su nuevo equipo. Le ganamos 4 a 2 a Defensor en la cancha de Bella Vista. Liverpool formó el día del debut de Sixto, con Roque Máspoli al arco, Grosso y Ferro, Cacharpa Pérez, Sixto y Artigas Rodríguez, Antonio Vitola, Washington Eirín, Gorla, Manuel Arbelbide y Barriola. Se da un caso curioso en este encuentro: En la zaga de Defensor estaba el incanzable Lorenzo Fernández. Liverpool convierte un gol y sin que el juez lo viera porque estaba lejos, Lorenzo desprendió la red y protestó, diciendo que la pelota entró por un costado. El juez no dio el gol. Según la prensa, Sixto fue uno de los mejores del partido.

El 30 de abril en el empate 2 a 2 con River Plate Sixto convierte su primer gol. Juega los 10 partidos de ese torneo, que Liverpool termina penúltimo. En el Uruguayo el equipo mejora increíblemente y  tiene una gran actuación, y Sixto comienza a ser fundamental. Como ejemplo alcanza con ver lo que decía la prensa el día del empate 1 a 1 con Bella Vista: “ Durante el primer periodo Liverpool, contando con dos figuras que imprimieron gran acción al match, Sixto González y Gorla, sobre todo el primero, desarrollaron un juego práctico y de singular justeza, que le valió la victoria parcial jugando casi todo el periodo en el campo contrario, y poniendo en aprietos la defensa de Olivos….En la etapa complementaria, en que se registró la decadencia de Sixto González, gran animador en el tiempo inicial, y lógica consecuencia, Bella Vista se fue agrandando y superando netamente a su rival, que debió sufrir la caída de su arco”. Ahí se ve como el nivel de Liverpool comenzaba a depender del nivel de Sixto. Ese año de 1939 terminamos con una muy buena actuación en el uruguayo, la mejor hasta el momento en primera, finalizando en el cuarto lugar. Ganamos 8 partidos de los 20 que jugamos, empatamos 3 y perdimos 9. Sixto fue titular en 19 de esos 20 encuentros.

La presencia en la Celeste en 1940 y la Copa Río Branco

En febrero de 1940 comienza a practicar el seleccionado preparándose para enfrentar a Brasil por la copa Río Branco. Un combinado B de la selección enfrentó amistosamente a Liverpool. En el combinado jugaron nuestros Eirín y Antúnez, contra sus compañeros, con Roque en el arco negriazul. La selección suplente nos ganó 2 a 1. El combinado A de la Celeste, con Sixto en el medio campo le ganó a Nacional 3 a 1. En marzo juega y gana un amistoso contra Chile en el Centenario, jugando de titular Obdulio. La Celeste queda preparada para ir a Brasil. Aquella selección plantará un gran antecedente 10 años antes de Maracaná. Viajó sin mucha fe por parte de la prensa y la parcialidad, ya que era un equipo joven y que enfrentaba a un Brasil en el que todavía brillaba el gran Leónidas, goleador del mundial dos años antes.

El 24 de marzo de 1940, en el Estadio Sao Jaunario de Río, se da el debut de Sixto en la Selección, dejando el DT, el “Vasco” Cea, fuera del equipo titular a Obdulio. Jugamos con Julio Barrios; Héctor Romero y Agenor Muniz; Carlos Martínez, Sixto y Raúl “Pulpa” Rodríguez; Ricardo Pérez, Oscar Chirimini, Pedro Lago, Severino Varela y Camaití. A los 38 minutos Ricardo Pérez puso el 1 a 0 para la Celeste. A los 47 empató Hércules para Brasil, y Pedro Amorim puso el 2 a 1 para los locales a los 55. Aumentó Leónidas al minuto. La Celeste estaba 2 goles abajo. En el minuto 63 se da el descuento que nos pone en partido de nuevo. Aquí el dato es incierto. Si bien en la página oficial de la AUF y en libros como “Crónica Celeste” de Luis Prats dan a Sixto como autor del descuento, leyendo prensa de Brasil encuentro que en los diarios locales dan como autor del gol al luego negriazul “Pulpa” Rodríguez. Un doblete de Severino Varela, a los 64 y 89, marca a fuego ese día en la historia de nuestro fútbol. Dice el “Diario Carioca” del 24 de marzo: “González, o joven “pívot oriental”, possue boa collocaçao em campo, controle de bola, marca e distribue, com relativa facilidade”. Espero sea bueno su portugués.

La Celeste le ganó en Río a Brasil 4 a 3, luego de ir perdiendo por 2 goles. Remontó un resultado adverso y le ganó por un gol….toda una premonición de lo que pasará en Maracaná 10 años después. Fue una de las cuatro oportunidades en que triunfamos en tierras brasileras ante el local, las restantes fueron en 1950 por la misma copa, nuevamente en 1950 en la final del mundial y en 1992 disputando un amistoso. A la semana siguiente, el 31 de marzo, se jugó la revancha y Uruguay logró empatar 1 a 1 con los brasileros otra vez en Río, en el estadio de Vasco Da Gama, con goles de Leónidas y Severino Varela. Con el empate Uruguay termina trayendo la copa Río Branco para nuestro país por primera vez desde que se instauró. Nuevamente Sixto fue titular en los Celestes. Y campeón en el primer torneo que disputa.

El Campeonato Uruguayo de 1940

En el Campeonato Uruguayo 1940 arrancamos goleados por el gran equipo que tenía Rampla, 5 a 2. La siguiente fecha se mostraba difícil, pues no tocaba con Peñarol, que venía de empatar 3 a 3 con Wanderers pero que en el año nos había goleado ya dos veces. El partido se jugó el 29 de junio en el Estadio Centenario. Liverpool jugó con Roque Máspoli, Grosso, Ferro, Leguizamón, Sixto González, Artigas Rodríguez, Cerviño, Eirin, Benítez, Antúnez y Balao. El primer tiempo fue parejo, con llegadas de ambos equipos pero sin demasiado peligro, dado que las delanteras no estuvieron muy efectivas. Peñarol atacó un poco más, pero Roque y sus compañeros de saga estuvieron muy seguros. En el segundo tiempo Liverpool emparejó un poco los ataques y llegó a dominar en algunos momentos, hasta que en el minuto 43 del segundo tiempo una corrida de Balao termina en pelota para Benítez, que convierte el ansiado gol de Liverpool. Termina siendo un triunfo histórico, pues Liverpool derrotó por primera vez a Peñarol en el régimen profesional ese día. Con Sixto de capitán.

En la quinta fecha, el 21 de julio, en el enfrentamiento con Defensor que empatamos 2 a 2 Sixto es expulsado por primera vez jugando para nuestro equipo. En la fecha 18 enfrentamos a Bella Vista, el 24 de noviembre. Las diferencias entre un equipo y otro se marcaron desde el comienzo, ya que a los 10 minutos el resultado ya estaba 2 a 0 a favor de Liverpool. Durante el transcurso del partido los goles siguieron llegando hasta contabilizar 9. Es un resultado histórico, porque es el resultado más abultado que el equipo de la cuchilla ha obtenido en el régimen profesional, y es la goleada más grande entre dos cuadros “en formación” en el torneo de Primera en el profesionalismo, con un cuaterno de Benítez. Liverpool jugó con Roque al arco, Ulises Chifflet, Barriola, Artigas Rodríguez, Sixto González, Leguizamón, Amado, Eirin, Benítez, Manuel Antúnez y Balao. Terminamos el torneo 5tos, detrás del campeón Nacional, Rampla, Wanderers y Peñarol. Jugamos 20 partidos, ganamos 8, empatamos 3 y perdimos 9, totalizando 19 puntos. Otro muy buen año negriazul. De los 20 partidos, Sixto juega 16, no convierte ningún gol y es expulsado una vez. Sixto ya era el capitán y la figura del equipo. Y más gloria aún queda por contar.

El Liverpool de 1941


En 1941 se dan algunas idas importantes del equipo, como el golero Máspoli a Peñarol o el goleador Manuel Antúnez a Rosario Central de Argentina. Sixto, que era pretendido por Peñarol, no se fue a ningún equipo pues fue declarado intransferible. En el Competencia comenzamos venciendo 2 a 0 a Bella Vista, y le ganamos 1 a 0 a Defensor con gol de Sixto de penal. También convertirá de penal en la victoria 2 a 0 a Racing y en la goleada 3 a 0 a Sud América. En la décima fecha se enfrenta a su hermano Santos González, en partido que Central y Liverpool empatan 1 a 1. Peñarol sale campeón, Nacional segundo y en gran campaña Liverpool termina tercero a 3 puntos de Peñarol y 2 de Nacional: “…el excelente team de la cuchilla ha sido la nota saliente del campeonato. Sus presentaciones han señalado siempre progresos en el equipo y con toda justicia ocupa un lugar destacado, correspondiendo se le llame el campeón de los clubes chicos”. Sixto juega los 10 partidos de titular, y hace 3 goles, los 3 de penal.

En el Campeonato Uruguayo Liverpool no rendirá de igual manera. En la primera rueda tenemos gran actuación solamente en un partido que le ganamos a Sud América 3 a 0 con un gol de Sixto de penal, y los otros dos de Amado, el último también de penal. Antes también Sixto había convertido de penal en la victoria 2 a 1 a Wanderers. Nuevamente se cruza con su hermano menor Santos en la 10 fecha, empatando nuevamente con Central, ahora 0 a 0.  En la segunda rueda, en la segunda fecha, perdemos con Bella Vista un partido con varios incidentes. Según la crónica de la prensa Sixto González jugó sólo contra todo Bella Vista en el primer tiempo, pues el equipo no lo acompañó. Esa primera parte terminó 1 a 1, siendo de Sixto el gol de Liverpool. En el segundo tiempo el papal Ricardo Faccio, padre de Juan Ricardo, luego jugador y técnico negriazul, le hace falta a Eirín, y en ese momento entra en la cancha nuestro técnico, Lorenzo Fernández, que se agarra a golpes de puño con Faccio. El juez los expulsó a ambos. Bella Vista, a pesar de un hombre menos y de errar un penal, terminará ganando 2 a 1. Y como si no quisieran superarse, Sixto y su hermano menor Santos se enfrentan nuevamente, y Central y Liverpool empatan 0 a 0. Finalizamos 8vos en el torneo, con un total de 20 partidos jugados, 6 partidos ganados, 5 empatados y 9 perdidos. Sixto fue titular en los 20 partidos, e hizo 3 goles, 2 de ellos de penal.

Obdulio y Sixto

Las grandes actuaciones de nuestro crack instalaron una polémica sobre cuál era el mejor “centrojas”, si Sixto o si Obdulio. Pedro Cea, técnico en ese tiempo de la Celeste, irá incluyendo en el combinado a los dos, alternándolos y haciendo entrar a uno por otro. En 1941 se juega el sudamericano extra en Chile. Sixto aparece convocado a la selección junto a los luego campeones mundiales Gambetta, Aníbal Paz y Obdulio. También era convocado Alberto “Torito” Benítez, goleador negriazul. El entrenamiento previo a la ida a Chile fue nefasto, pues se le gana apenas 1 a 0 a la tercera de Peñarol. Sixto no entró en todo el partido. Poca fe se le tenía entonces al equipo que viaja a Chile, con Sixto como único representante negriazul en el plantel definitivo. A pesar de esa poca esperanza en una buena actuación, llegados al torneo los celestes cumplieron un debut excelente, venciendo a Ecuador. La prensa decía: “El Team Celeste, excelentemente piloteado por Sixto González –que resultó la figura de la cancha- aseguró su conquista ya en el primer período, al señalar 4 tantos”. El partido termina con una goleada de 6 a 0. Los chilenos vencen a Ecuador y a Perú pero otra vez la celeste estropea la fiesta del anfitrión. Le ganamos 2 a 0 y Sixto fue suplente, entrando por Obdulio faltando 10 minutos. A pesar de haber sido la figura del partido anterior, el técnico celeste lo hacía alternar con Obdulio en el centro del campo. Contra los argentinos caemos 1 a 0 en la única derrota que sufrimos en la copa, que fue muy polémica. Los jugadores uruguayos de aquel partido repitieron por años que el juez chileno Alfredo Vargas fue nefasto. En el primer tiempo Obdulio se la da a Porta, que convierte un gol que el juez anula, por presunta mano del autor del gol. Uruguay dominó ese brusco primer tiempo. Sin embargo a los 9 minutos del segundo tiempo Argentina abre el marcador con gol de Sastre ante gran jugada previa del “Charro” Moreno. Luego de haber recibido el único gol que le convirtieron en el torneo la Celeste puso a la Argentina contra las cuerdas, creando varias situaciones de peligro. Cuando el partido estaba por terminar Oscar Chirimini convierte un gol, y el juez lo cobra, pero enseguida es rodeado por los argentinos. El árbitro habla con el línea, se retira del campo y al volver anula el gol. Los celestes protestan y ahí es cuando termina en el suelo Sixto, con algunas costillas fisuradas, sin que se sepa bien que sucedió. Se acusó al argentino Sbarra de haberlo pateado en el suelo. Sixto había entrado por Obdulio y tuvo que abandonar el juego, entrando Obdulio nuevamente, cosa que se permitía en aquel entonces. Sixto terminó en el hospital, dado de alta pero mantenido en observación, llegando lesionado a Uruguay. Luego de perder con Argentina le ganamos 2 a 0 a Perú y esperamos la chance de un triple empate en la punta, pero Argentina vence a Chile y se corona campeón.

El gran año 1942 para Sixto González

Para 1942 Brasil debería haber sido sede de la cuarta Copa del Mundo, pero por el conflicto bélico no se disputó el torneo y Brasil quedó a la expectativa como anfitrión del próximo mundial, sin fecha de disputa. Sí se jugó la Copa América y se hizo por primera vez en el Estadio Centenario, en el verano uruguayo. Tuvimos el honor de salir campeones en casa, y que nuestro capitán Sixto González integrara ese plantel. El técnico Pedro Cea ya se había decidido por Obdulio en la titularidad en el medio de la cancha. El debut fue con goleada a Chile 6 a 1, con Obdulio siendo la gran figura en el plano defensivo y además haciendo un gol. A los 81 minutos entró por él Sixto González. En su debut Argentina sufría más de la cuenta para vencer a Paraguay 3 a 2, y luego vencerá 2 a 1 a Brasil. Nosotros volvemos a jugar contra Ecuador, nuevamente con Obdulio de titular. Uruguay juega gran partido y golea 7 a 0. Ese día Severino Varela hizo 3 goles, y Sixto entró por Obdulio a los 65 minutos. Argentina a este mismo Ecuador le hará 12 goles. El 24 de enero nos cruzamos con Brasil. Le ganamos apenas 1 a 0 con gol de Severino Varela. Sixto no entró en este encuentro y no lo volverá a hacer en todo el torneo. Argentina por su lado daba cuenta de Perú 3 a 1. El siguiente partido celeste fue contra Paraguay. Le ganamos en buena forma 3 a 1. Argentina pierde contra Chile su primer punto al empatar 0 a 0. La Celeste vuelve para ganarle 3 a 0 a Perú. En este partido salió Obdulio pero fue suplantado por Eugenio Galvalisi. En la última fecha se enfrentan Uruguayos y Argentinos. En el segundo tiempo una gran jugada entre Ciocca y Chirimino termina en violento tiro de Zapirain que vence al arquero Gualco y abre el tanteador para los celestes. Uruguay siguió atacando sin descuidar la defensa y logró controlar el partido, volviendo a salir campeón sudamericano y manteniendo el histórico invicto de local. Fue ésta la última participación importante de Sixto con la selección, resultando campeón a pesar de haber jugado escasos minutos.

Liverpool no tuvo una buena presentación en el torneo Competencia. Terminamos décimos y últimos, con solo 1 victoria y 2 empates en 9 partidos. La prensa explicó lo bajo de Liverpool por el bajón de Sixto, su gran figura, que no cumplió un buen torneo. Fue titular en los 10 partidos, pero no jugó como sabía hacerlo. Y perdió por primera vez con su hermano Santos, en la 4ta fecha, cuando Central nos gana 2 a 1.

Para el Campeonato Uruguayo, con la conducción del “Olímpico” Pedro Arispe, no se esperaba una actuación destacada de Liverpool. Sin embargo, con la mejoría de Sixto, se llegó a estar en la punta de la tabla en las primeras fechas. En la 4ta Liverpool golea a Central 4 a 1 y al fin Sixto vence a su hermano Santos. En la quinta fecha del torneo, jugada el primero de agosto, el gran partido era entre el líder Nacional y el escolta Liverpool. Nacional no era la máquina de años anteriores, pero contaba con grandes figuras, entre ellas “El Príncipe” Aníbal Ciocca, que volvía a jugar frente a los nuestros luego de algunas ausencias. Se jugó en el Centenario. Liverpool salió a la cancha con Di Matteo, Lorenzo y González, Rodríguez, Sixto González como capitán y Leguizamón, Ozcoide, Eirín, Benítez, Antúnez y Freire. El encuentro fue parejo, con algo de dominio de Nacional en el arranque, aunque Liverpool se mostró ordenado y fue emparejando el partido enseguida, al punto de ponerse en ganancia a los 13 minutos. Antúnez se la tira a Freire, el puntero levanta un centro que pasa por todo el frente del arco de Nacional, nadie la rechaza y del otro lado aparece Ozcoide y el “wing” remata corto y convierte el primero. A los cuatro minutos “Mandrake” Castro hace gran jugada y le da la pelota a Atilio, que vence a Di Matteo. Pero a los 25 otra vez Freire en la incidencia, levanta un centro largo y Aníbal Paz inexplicablemente ve como se le excurre la pelota de las manos, y Benítez con el cuerpo la mete en el arco. Al minuto “El Príncipe” Ciocca con fuerte tiro no dejó ni festejar a Liverpool y empató el partido, que terminó 2 a 2 en ese primer tiempo. El segundo tiempo bajó en intensidad y parecía que terminaría en empate. Pero faltando 6 minutos Freire, la figura de Liverpool, se escapó a Luz, y frente a Aníbal Paz logró el 3 a 2 final. Se festejó por todo lo alto el triunfo, porque no sólo significó la punta del torneo en solitario por primera vez: se le ganaba por primera vez a Nacional en la historia del Profesionalismo en el campeonato uruguayo. Liverpool quedaba como único líder con 8 puntos, seguido por los dos grandes con 7.

En la segunda rueda Liverpool gana empata y pierde casi en la misma proporción. Nacional sale campeón y continúa su racha del Quinquenio. Finalizamos en la 6ta posición, con 7 victorias, 3 empates y 8 derrotas, con 31 goles a favor y 34 en contra, alcanzando los 17 puntos, quedando a 11 de Nacional. Pero con el gusto de haber sido por un momento el puntero del torneo uruguayo en solitario por primera vez. Y con el gusto de haberle ganado por primera vez a Nacional, que termina campeón del torneo. Sixto jugó todos los partidos, excepto en la derrota con Peñarol de la primera rueda, y no convirtió ningún gol.

El año terminó con la preparación de la selección para amistosos a jugar contra Argentina en enero del año 43, en partidos organizados por los círculos de periodistas deportivos de Uruguay y Argentina. Volvieron a ser citados Sixto González y Pedro Leguizamón. Para el primer encuentro, de visita, viaja en la delegación sólo Leguizamón, que fue titular en partido que perdimos 1 a 0, gol de Martino. Ese partido fue histórico, porque en la delantera debutó el argentino Atilio García….jugando para Uruguay. En la revancha en el Centenario el 9 de enero la celeste golea 6 a 2. Juega de titular Leguizamón y entra al final Sixto por Obdulio. Y Atilio le hace a su país de origen dos goles.

En el Competencia de 1943 debutamos perdiendo feo con Rampla 4 a 1. En la segunda fecha nos enfrentamos con Peñarol en el Estadio y perdemos 3 a 1. Pero la prensa destacó el trabajo de Sixto González, la figura consular esa tarde en el negriazul. Decía la hoja deportiva de El Bien Público: “Perfecto en el quite y habilidoso en el apoyo, fue González columna firme de su team y motivo central de la atención de los espectadores”. En la última fecha volvió a jugar contra su hermano, empatando Liverpool y Central 1 a 1. Terminamos ese Competencia 5tos con 9 puntos, a 6 del campeón Peñarol. Sixto fue titular en los 9 partidos. En el Uruguayo terminamos en la 6ta posición y Sixto fue titular en los 18 partidos del campeonato. En la última fecha se cruza por última vez con su hermano. Central nos gana 2 a 1, e inclina la estadística de enfrentamientos entre hermanos a favor del menor. Santos González, le ganó 2 partidos a Sixto contra uno ganado por el crack negriazul.

Aquel gran partido contra Nacional

Para el arranque del año futbolero de 1944 Sixto no entrenaba porque estaba en discusiones con la directiva arreglando su contrato. En el Competencia no tuvimos un buen comienzo, hasta que perdemos 2 a 1 con Peñarol. Si bien caemos derrotados, el equipo jugó buen partido e incluso arrancó ganando con gol de Benítez. El gran cambio que mejoró el juego negriazul fue la vuelta al equipo de Sixto González luego de arreglar los problemas contractuales. Sixto fue para la prensa el mejor jugador del partido. Para tener una idea cabal de esto, alcanza con leer lo que decía la revista Mundo Uruguayo: “La vuelta de Sixto González lo fue todo para Liverpool en su ardiente lucha con el decano. El famoso pivote, frenó una delantera que no engranó de entrada y sirvió las pelotas como un maestro, haciendo que una delantera que no tiene grandes valores levantara en forma notable y apurara en todos los momentos a un Peñarol que no se repuso en ningún momento”. La mejora no duró más que ese partido pues Sixto no volvió a jugar y sin el capitán seguimos perdiendo y terminamos el Competencia últimos. Ahí tenemos otra vez una muestra de la importancia del Capitán en el equipo.

En el arranque del Campeonato Uruguayo nos toca con el campeón e invicto Central, en Belvedere. Jugamos con Bores, Ackerman y Holdoway, Rodríguez, Sixto de capitán que vuelve al equipo y Moraña, el argentino recién incorporado Cavadini, Eirín, el “Toro” Benítez, Carrasale y el argentino Lombardini. Arrancamos ganando a los 9 minutos con gol de Lombardini, pero nos empata Vomero. En el segundo tiempo el “Toro” Benítez pone el segundo y Liverpool arranca el campeonato dando la sorpresa: el último del Competencia vence al campeón y le corta su invicto.  En esa primera rueda a Sixto lo expulsan dos fechas seguidas, contra Peñarol y contra River. Contra los aurinegros Sixto declara que el delantero Elmo Bovio, que hizo dos goles, se pasó agrediendolo verbal y hasta físicamente, y que la falta por la que fue expulsado fue en respuesta a esas provocaciones. El tribunal no hace mucho caso y lo suspende por 3 fechas. Sixto se pierde tres partidos, y sin su capitán Liverpool de los 6 puntos logra apenas 1.

​Para la segunda rueda del campeonato caemos contra Central 2 a 0, y nos cruzamos de nuevo en el camino de Nacional. Es el partido de la vuelta de Sixto luego de la suspensión. Liverpool jugó con Martiarena en el arco, López y Rosas Riolfo, Moraña, Sixto y Leguizamón, Cavadini, Deus, Vidal, Santiago y Chessio. En la revista LIVERPOOL de 1991, en el número 1, cuenta Rosas Riolfo que en este partido Sixto González jugó un verdadero partidazo: “Sixto llenó la cancha. Atrás estábamos Martiarena, Enrique López y yo. Esa tarde “Carucha” borró de la cancha a Luis Ernesto Castro, Aníbal Ciocca, Atilio García, Roberto Porta y Bibiano Zapirain…y copó a Galvalisi”.

En el primer cuarto de hora del partido nuestro capitán intentó poner en juego a Vidal con pase alto, pero Candales le comete falta. El juez sanciona la pena. El encargado de ejecutarla fue Sixto. Lo hizo con tiro alto, hacia el centro del área de Nacional. La pelota fue cayendo al sector donde se encontraban Cavadini y Aníbal Paz. El ex meta de Liverpool salió algo tarde, lo que permitió que Cavadini cabeceara y decretara la apertura del marcador.  Algún otro ataque para cada uno y una gran atajada del golero Martiarena a tiro de Luis Ernesto Castro marcaron el resto del primer tiempo, que terminó 1 a 0 para Liverpool. No habían pasado 10 minutos del segundo tiempo, cuando Liverpool encuentra el segundo de forma algo fortuita. Deus avanzó con la pelota y ya cerca del área fue interceptado a media por Candales que no pudo restar con toda comodidad aprovechando Pini para complementar la jugada de su compañero pero con tanta mala suerte que la pelota rebotó en la espalda de Candales, saliendo para un costado. Santiago, que estaba atento a la jugada, se adelantó y agarró la pelota, tirando fuerte “shot” que entró por al arco rozando el palo. Quedó así decretado el 2 a 0 para Liverpool. Decía la crónica del diario La Razón: “….los negriazules tuvieron una defensa sólida y bien plantada, donde Sixto González, la gran figura de la cancha, se mostró como un perfecto pívot del equipo”.

La Mañana decía sobre nuestro capitán: “No pudo ser más auspiciosa su rentree, ya que señaló una performance de extraordinario relieve, y fue sin discusión alguna la figura más destacada de la cancha y factor preponderante de esa resonante victoria de su equipo. Cubrió el centro del campo con acción firme y buena colocación, frustrando de continuo las intentonas de los agiles adversarios y resultando a la vez un verdadero orientador en la gestión de sus delanteros”.

Sixto volverá a ser figura y mejor del partido cuando goleamos a Sud América 3 a 0 con goles de Deus, Santiago y Lombardini, y también es la figura cuando le empatamos a Defensor, que pierde con ese resultado la punta. La campaña de Liverpool terminó con un séptimo puesto, a 14 puntos de los grandes. Sixto fue titular en 15 de los 18 partidos, sin hacer goles y con dos expulsiones.

La despedida a la Celeste en 1945 y su adiós al fútbol

En 1945 la Celeste se embarca en un Sudamericano Extra a disputarse en Chile. Para ese torneo es nuevamente citado Sixto González. Pero al final no concurre.  Sucede que él, Roque Máspoli y el ramplense Riephoff, los tres empleados de la UTE, pidieron licencia para poder ir al torneo. La UTE se las negó. Pero cada caso terminó distinto. Sixto priorizó el trabajo, Riephoff viajó igual sin la licencia y Roque terminó trabajando horas extras y sumando licencia acumulada al final la UTE le da la licencia pedida. Una pena la forma en como se despide de la selección nuestro máximo representante. 

El año futbolero para Liverpool arranca con un Competencia que fue muy malo. Solamente ganamos un partido, a River Plate 3 a 2, donde las figuras fueron Sixto y el “Toro” Benítez, que pegó doblete. Ocupamos la última posición. El Competencia era un torneo que siempre nos costaba. Sixto solamente jugó 3 partidos.  En el Uruguayo Liverpool pierde los 4 primeros partidos, sin Sixto en cancha. Vuelve para la derrota con River y el empate a Rampla el 5 de agosto de 1945, el que a la postre será su último encuentro oficial por el torneo uruguayo. Se lesiona de entidad y lo perdemos para el resto del torneo. Volvimos a terminar 7mos como el año anterior. Sixto solo llegó a jugar  2 partidos. No jugará en 1946 y en 1947 aparece disputando algunas prácticas en el equipo suplente. Sin chances de jugar termina ese 1947 retirándose del fútbol y dejando para siempre su leyenda de mejor jugador de la historia de nuestro club en la opinión de varios. Nos dejó 107 partidos oficiales por el Campeonato Uruguayo y 3 goles con nuestra camiseta por el máximo torneo. Pero además nos dejó el orgullo de poder decir que en un momento, tuvimos al mejor “centrojás” del fútbol uruguayo. Un jugador que está en la historia de Liverpool, pero que debe ser recordado. Y que debe ser rescatado para la historia del fútbol uruguayo. Por las crónicas de la prensa está claro lo importante de Sixto en el andamiaje del equipo. Parecía que si Sixto no estaba o andaba bajo la suerte de Liverpool estaba echada. Creo que el gran ejemplo es esa ausencia de 3 partidos suspendido, en que apenas hicimos uno de los seis puntos. Vuelve Sixto, la rompe, y le ganamos a Nacional en el Estadio. Después de leer tanto sobre él, siento que si, que los veteranos tienen razón, que Sixto fue el mejor de nuestra historia. Y si no me cree a mi, no pasa nada. Piense que ee seguro…. si ud pudiera preguntarle a nuestro gran mito, al “Negro Jefe”, al que hizo callar a todo Maracaná con la pelota abajo del brazo, al capitán de la hazaña más grande de la historia del fútbol mundia…..él seguro de diría: “….pero nooo…., que voy a ser el mejor yo?….yo no era el mejor….el mejor era el de Liverpool….Sixto….ese sí era un fenómeno”

Gustavo Castiñeira